Baleares incorpora a treinta militares como rastreadores ante el aumento de contagios
Redacción | 30/11/2021
Treinta efectivos de la Comandancia General de Baleares se incorporan hoy a la Central de Coordinación COVID-19 (CC-COVID-19) para apoyar las labores de rastreo y seguimiento de contactos. Con la incorporación de estos efectivos -que se distribuirán en tres turnos diferentes- la CC-COVID-19 dispondrá de 155 rastreadores: 30 militares y 125 del Servicio de Salud.
La Conselleria de Salud y Consumo, en un comunicado, ha agradecido la colaboración con el Ejército ya que "contribuye a acelerar las labores de investigación y rastreo de posibles casos para incrementar la prevención y evitar que los contagios aumenten".
Actualmente, Baleares tiene una incidencia acumulada a catorce días de 248,3, un dato inferior a los 428 casos que se registraron durante la quinta ola, que se produjo en el pasado mes de agosto. "La CC-COVID-19 ha sido primordial para luchar contra la pandemia y para frenar la incidencia de la enfermedad en cada una de las oleadas. También ha sido fundamental para realizar el seguimiento de los casos y garantizar el aislamiento de los contactos estrechos", aseveran desde el departamento dirigido por Patricia Gómez.
Los efectivos del Ejército llegaron por primera vez el 11 de septiembre de 2020 y trabajaron durante catorce meses —en la llamada operación «Misión Baluarte»— a la CC-COVID-19 rastreando casos positivos y apoyando al equipo de rastreadores del Servicio de Salud.
El apoyo militar ha variado según la incidencia y aumento de casos. Durante los meses de diciembre de 2020 y enero, febrero, julio y agosto de 2021 se activaron militares adicionales, hasta llegar a un máximo de 130 militares participando en la misión. En esos momentos de incidencia alta llegaron a trabajar 421 rastreadores en la CC-COVID-19: 130 militares y 291 trabajadores del Servei de Salut.