Tensión en los Juzgados de Palma al llegar el asesino del Secar de la Real
Irene R Aguado | 06/11/2020
El asesino confeso del Secar de la Real, que mató a su pareja e intentó enterrarla en el Camí de Ca Na Verda, ha llegado a los juzgados de Violencia sobre la mujer de Vía Alemania, en Palma, para pasar a disposición judicial.
Alrededor de las 11.20 de este viernes, el asesino ha llegado a los juzgados, donde había decenas de personas esperando y un gran despliegue de seguridad de la Policía Nacional.
Los agentes policiales ya sabían que este evento podía provocar tensiones, por lo que han acotado la zona para que solo pudieran pasar los vehículos oficiales. Y es que, gran parte del volumen de personas que había frente a las puertas de los juzgados, eran familiares de la pareja.
El asesino y la víctima eran pareja sentimental -a la vez que primos-. A la llegada del homicida, la familia ha empezado a proferir insultos: "¿Por qué la has matado? Asesino, tú también deberías quitarte la vida".
Las autoridades ya habían previsto que habría grandes tensiones, por lo que en un primer momento se planteó que el asesino prestase declaración vía telemática, pero finalmente se decidió que acudiese presencialmente a los juzgados. De todas formas, cabe recordar que aunque hasta ahora Antonio se había mostrado con actitud colaborativa, el pasado jueves se negó a declarar ante los inspectores de la Policía Nacional.
Antonio Cortés Cortés, el asesino de 35 años y nacionalidad española, y Remedios Cortés Cortés -una mujer de 32 años conocida en el barrio como La Reme-, eran pareja desde muy jóvenes. Sin embargo, hace un año, Reme decidió cortar la relación. Antonio nunca encajó bien la decisión de Reme, y desde ese momento empezó a hacerle la vida imposible, según relatan los familiares.
Han explicado que no tienen constancia de maltrato físico en la pareja, pero sí aseguran que Antonio era un hombre muy celoso que prohibía a Reme salir sola de casa. Según explican los familiares, no la dejaba quedar con sus amigas, ni siquiera ir sola al supermercado.
Durante la reconstrucción del crimen, el asesino confesó haber matado brutalmente a Remedios, utilizando un destornillador y una piedra de grandes dimensiones para acabar con su vida. El informe de la autopsia revela, además, que se ensañó durante el asesinato hasta convertirlo en un homicidio especialmente sangriento.
