Sindicatos de profesores critican: "Aulas con 20 alumnos donde no se cumplen las distancias"

Esta vuelta al cole, como la mayoría de acontecimientos de este desafortunado año, es, como mínimo, atípica. Las prisas por volver a las aulas tras seis meses en casa, los malos datos de los contagios y las incertidumbres y opiniones confrontadas han sido el tema de conversación durante las últimas semanas.

"No hemos dejado de mostrar la preocupación frente a la gestión que se ha llevado a cabo por parte de la Conselleria de Educación. Entendemos que las medidas que se han tomado son, en muchas ocasiones, contradictorias cuando entramos en la realidad de los centros. Aulas con 20 alumnos, donde no hay la distancia física que nos recomiendan las autoridades sanitarias; alumnos que tendrán que llevar la mascarilla 5 horas seguidas y no podrán jugar con normalidad con sus compañeros sin pensar cómo afectará esta situación a su desarrollo emocional...", lamentan desde el Sindicat Docent Alternativa.

El sindicato también apunta a los propios profesores, quienes, señalan, ante esta situación se ven abocados a una carga inasumible de trabajo para poder programar y gestionar este nuevo curso. Y ello, sin descuidar la salud -tanto física como mental- de sus alumnos. 

Ante la falta de entendimiento entre docentes y autoridades -tanto en Baleares y el resto de autonomías, como a nivel nacional- ya se han convocado para las próximas semanas huelgas y manifestaciones.

"El resultado frente a nuestras demandas ha sido el habitual desde que comenzó el pasado curso: no nos escuchan. La manera de actuar del conseller de Educación se ha convertido en un hábito. Primero se convoca una rueda de prensa, en la que se anuncian las medidas y después hacen las mesas informativas, donde la negociación ha desaparecido", señalan desde el Sindicat Docent Alternativa.

Sin embargo, este sindicato de docentes de las Islas se muestra en contra de las manifestaciones y huelgas convocadas, debido a que "la situación epidemiológica no es favorable".  "No por ello dejaremos de reivindicar y pedir mejoras, tanto en el sistema educativo como en nuestras condiciones laborales". Y sentencian: "Queremos educación de calidad, y tenemos claro que en estas condiciones es imposible".